En Osaba Iluminación presumimos de ser Lighting Designers y lo hacemos con conocimiento de causa. ¿Quieres saber por qué?
El término Lighting Designer, es muy poco conocido y tiene una traducción que puede sonar rara, porque viene a decir que lo que hacemos es “diseñar iluminación”.
Pero ¿la iluminación se diseña? ¡Pues claro que si! Y es un trabajo fundamental si queremos que un proyecto arquitectónico llegue a buen puerto, porque aunque la iluminación no sea el elemento protagonista de una edificación, es imprescindible para garantizar un ambiente óptimo para las personas que lo utilizan, ya sea para trabajar o para disfrutar.
Un Lighting Designer es un especialista en iluminación, con un conocimiento notable sobre el mundo de la construcción, ya que la luz tiene una relación muy estrecha con la arquitectura e intentamos crear sensaciones con la decoración y la luz, buscando la atemporalidad.
Pero un Lighting Designer también tiene que tener un punto de ingeniero, imprescindible para ser capaz de llevar la iluminación del concepto a un proyecto real y tangible, que sea útil, fácil de mantener, perdurable y eficiente energéticamente.
Por eso en Osaba Iluminación contamos con un equipo multidisciplinar formado por arquitectos, interioristas e ingenieros, que son capaces de hacer realidad cualquier idea, por más imposible que parezca.
Nuestra función es ejercer de mediadores entre todos los que participan en el proceso creativo del proyecto, ya sean arquitectos, ingenieros, interioristas, constructores o propietarios, para que todos ellos vean plasmadas sus ideas. De manera que las interpretamos y las hacemos realidad a través del diseño de la iluminación y por supuesto ajustándonos al presupuesto del que disponemos.
Por eso la participación del lighting designer es clave para el éxito de un proyecto de iluminación contemporáneo, ya que asegura la calidad de la luz, y el cumplimiento de las necesidades de confort, eficacia y sostenibilidad, desde el punto de vista normativo, económico y energético.
Hay que tener en cuenta, además de los parámetros técnicos, energéticos y normativos, otros aspectos como la calidad de la luz que se produce en el espacio según la temperatura de color de las fuentes de luz, la dirección de la luz, el confort visual, la intensidad, la sombra o la penumbra, para percibir sensaciones, referencias visuales, calidad de materiales y volumetrías.
Por supuesto es importantísimo estar a la última acerca de las normativas vigentes en cada momento… ya que desconocerlas puede provocar que se comentan grandes errores con consecuencias para el cliente, como hemos visto en múltiples ocasiones en las que nos han pedido que auditásemos otros proyectos.
¿Cómo trabajamos? Normalmente todos los proyectos tienen tres fases fundamentales:
- Un análisis preliminar del proyecto: en el que valoramos los requerimientos o necesidades, y el análisis cuantitativo y cualitativo.
- Proyecto técnico: Durante el que desarrollamos el proyecto de iluminación como tal a través de: conceptos de diseño, análisis y elección de la luminaria, cálculos lumínicos,… y por supuesto, un plan de mantenimiento.
- Evaluación presupuestal.